Entrevista

Luis Benítez: “La poesía argentina no termina en la Avenida General Paz”

Por Alberto Boco i

En octubre de 2025, el sello porteño Clara Beter Edicionesii distribuyó en librerías Poesía Argentina del Siglo XXI, una selección de las y los poetas de todo el país que publicaron su primer poemario entre 2000 y 2025, realizada y prologada por el destacado poeta, narrador y ensayista literario Luis Beníteziii. Entrevistado en exclusiva para ECM Digital, el compilador brinda sus precisiones sobre esta obra, que trata la nueva poesía argentina, con criterio federal e inclusivo

¿Cómo surgió el proyecto de editar esta selección de la nueva poesía argentina?

Fue idea de nuestro generoso editor, Sergio Minore, titular de Clara Beter Ediciones, quien en un aparte del exitoso Festival de Poesía de Boedo 2025, realizado en marzo pasado en el Centro Cultural Julián Centeya, de Buenos Aires, me manifestó que dado que yo había publicado anteriormente mi ensayo Historia de la Poesía Argentina. De Luis de Tejeda al Siglo XX (Buena Vista Editora, Córdoba Capital, 2019) y habían pasado ya 25 años desde el período abarcado, bien podría ocuparme de las y los poetas que dieron a prensas su primer poemario en este último lapso. Agregó que su sello estaba interesado en publicar este trabajo. Le agradecí a Minore su confianza en mis capacidades para hacerlo, pero asimismo le expresé cuáles eran las dificultades que ofrecería concretarlo.

¿Cuáles eran éstas?

Las razones principales son, por una parte, el amplísimo abanico de búsquedas estéticas emprendidas por las autoras y los autores nacionales, a partir de la década de los 90 del siglo anterior al presente, distanciados del agrupamiento en corrientes poéticas más o menos definidas dentro de las vanguardias tan propias de la modernidad. Característica que no solo perdura en el presente, sino que se ha tornado una peculiaridad del género, conlleva la dificultad de establecer lineamientos generales, nexos comunes entre los creadores del siglo XXI o meros señalamientos de coincidencias estilísticas o temáticas. Por otro lado, persiste el sempiterno problema del acceso directo a las obras publicadas en el conjunto del país, asentado en las dificultades de distribución de alcance nacional de la extensa producción poética de las veintitrés provincias argentinas. Un territorio literario donde, por una simple razón aritmética, se gesta la mayor parte de la poesía que nos es propia. Ello, aunque todavía y muy lamentablemente, no faltan quienes se empeñen en resaltar exclusivamente las obras y los nombres de autoras y autores de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, como si la poesía argentina terminara en la Avenida General Paz. ¡Un absurdo! La enorme riqueza poética y la diversidad estilística de todo nuestro país es un fenómeno concreto y actual, aunque los lobbies de los grandes grupos editoriales, académicos y los medios de comunicación porteños insistan interesadamente en lo contrario.

Por ejemplo, de mi querida provincia de Córdoba (cuna de la poesía argentina: El peregrino en Babilonia, Luis de Tejeda y Guzmán, circa 1663) se hallan incluidos los datos autorales y obras de Elena Annibali (Oncativo, 1978), Diego Brando (Leones, 1987), Pablo Dema (General Cabrera, 1979) y Marcelo Dughetti (Villa María, 1970).

Usted habla en su prólogo a Poesía Argentina del Siglo XXI de un cambio de paradigma, que afectó no solamente al género local, sino a toda la poesía occidental.

En efecto, y ese cambio de paradigma fue originado por el advenimiento de la posmodernidad. Datado por los arqueólogos de la cultura y el consenso más o menos generalizado como el texto fundante de la posmodernidad, el ensayo del filósofo, sociólogo y teórico literario francés Jean François Lyotard (1924-1998) La condición postmoderna: Informe sobre el saberiv entre otras cuestiones afirma que el cambio de paradigma incluye el final de los “grandes relatos” o “metanarrativas”, que el autor considera la característica fundamental de la modernidad y proyecta sobre todas las ramas de la cultura el término posmodernidad, hasta entonces exclusivamente empleado por la crítica de arte. El arribo de la concepción posmoderna se combinó con otros fenómenos simultáneos o derivados de él, para dar lugar a la situación presente del género.

¿Cuáles son esos fenómenos paralelos y derivados que afectaron a la poesía argentina y que usted señala?

a) Los alrededores del cambio de siglo implicaron la desaparición física de importantes nombres de la poesía argentina, varios de ellos de gran influencia sobre las generaciones anteriores a la del 2000. Poetas de la talla de Enrique Molina (1910-1997), Francisco Madariaga (1927-2000), Olga Orozco (1920-1999), Roberto Juarroz (1925-1995), Alberto Girri (1919-1991), Ricardo Molinari (1898-1996), Susana Thénon (1935-1991), Joaquín Giannuzzi (1924-2004), Juan Gelman (1930-2014), María Elena Walsh (1930-2011), Néstor Groppa (1928-2011), Alfredo Veiravé (1928-1991), Juan Carlos Bustriazo Ortiz (1929-2010), Jorge Leonidas Escudero (1920-2016), entre otros, sin que hasta la fecha, pese a los importantes logros alcanzados, se hayan producido obras capaces de emparejárseles, según la opinión de una parte de la crítica y los lectores.

b) Los autores de las generaciones anteriores a la del 2000 siguieron en su mayoría consolidando sus voces y alcanzado la madurez de sus obras, y aquellos que en los ’80 adscribían a tal o cual capilla literaria de las antes mencionadas optaron por seguir un camino diferente, logrando en la mayoría de los casos resultados muy superiores a los de sus primeras publicaciones.

(c) El proceso de escisión del género se profundizó aún más, generalizándose el fenómeno de la poesía presente en compartimientos estancos tanto por parte de las generaciones anteriores a la de los ’90 como de las posteriores. Salvo raras excepciones, ni los primeras ni estas últimas conocen ni leen lo que se produce en el otro campo.

d) Se profundizó aún más la atomización de la poesía nacional, iniciada en los ’90, cuando en la actualidad prácticamente la suma de las autoras y autores que publicaron sus primeros poemarios a partir de 2000 se encuentran embarcados en búsquedas estéticas particulares, sin sumarse a grupos, movimientos o trincheras poéticas que postulen posiciones comunes, criterios similares ni suscriban a clase alguna de manifiestos de una postura compartida.

Los cuatro ítems anteriores detallan fenómenos que se deben a la posmodernidad, y son características del género muy propias de nuestro tiempo y globalizadas en todo Occidente. Respecto de a), es observable que en la posmodernidad se produjo el ocaso del anterior modelo moderno, centralizado, vertical y jerárquico, sustituido por uno multicéntrico, transversal y no aceptado como jerarquizado en extremo, que conlleva la desaparición de los “nombres mayores” y de los “poemas-faro”, lo que origina que las pugnas por ocupar ese sitial de aceptación universal o local se vean notoriamente obstaculizadas por el cambio de paradigma. Desde luego, la discusión sobre el fenómeno no deja de tener sus contradictores, ansiosos de establecer un canon de referencia que brinde alguna seguridad a la vieja usanza, por un lado, y por el otro, para legitimar obras y autores desde la crítica leal a la realidad o la interesada en apropiarse de esta por razones extrañas a lo estrictamente literario. El impedimento hace imposible establecer un canon unánimemente aceptado, aunque sí posibilita, según otro punto de vista, subrayar tales y cuales relevancias, que no alcanzan de modo invariable para restaurar un relato ecuménicamente viable. La coyuntura exhibe el conflicto entre lo que ciertamente sucede; lo que debería suceder, para algunos, y lo que debería seguir sucediendo para unos terceros.

En lo que hace a b), c) y d), a escala local son fenómenos similares, como ya mencionamos, a los que tienen lugar en otros puntos de Occidente.

¿Es posible evitar la condición de autora o autor posmoderno?

La condición de autores posmodernos, se la conozca o no, es insoslayable. Ello se comprende mejor, estimo, si pensamos en los campesinos europeos del Quattrocento, quienes no sabían que ya eran hombres del Renacimiento. Habían salido de la condición propia de sus abuelos y bisabuelos, gentes todavía sumidas en los finales del Medioevo, y aunque lo ignoraban, ya las condiciones sociales, políticas, económicas y culturales de su época se habían transformado para siempre. Siendo el sujeto una construcción cultural, modificadas las características de la cultura, es transformado a su vez.

De igual modo en nuestros tiempos se puede aceptar o no, conocer o no el cambio de paradigma, pero ello no nos libra de recibir su inmediata influencia en todos los órdenes.

Finalmente, ¿cómo evalúa usted la repercusión que ha tenido esta obra entre los lectores y la crítica especializada y cuáles son las perspectivas a futuro?

Apenas distribuido en librerías en octubre de 2025, Poesía Argentina del Siglo XXI ha sido muy favorablemente recibido por los lectores y la crítica literaria de las Américas y Europa, así como mantiene una marcada presencia esta novedad editorial en las redes sociales. Las autoras y los autores incluidos en la obra han expresado su satisfacción, que es la misma que tenemos el sello editor y yo por lo que hemos logrado. No descuento la posibilidad de lanzar el año próximo un segundo tomo, del mismo tenor y con otras obras y nombres incluidos. De hecho, ya estoy continuando mis investigaciones en esa dirección, por si resulta factible sumar un volumen siguiente a este trabajo. Deseo subrayar una vez más la generosidad de Clara Beter Ediciones al hacer posible esta edición 2025, para la que ya prepara varias presentaciones en diferentes locaciones, previstas para el corriente año y comienzos del próximo.


i Alberto Boco es poeta. Nació en Buenos Aires, República Argentina, en 1949, donde actualmente reside. Ha publicado 10 libros de poemas: “Arcas o pequeñas señales” – Buenos Aires – 1986 – Libros de Tierra Firme. “Galería de ecos” – Buenos Aires – 1989 – Ediciones Ultimo Reino. “Ausentes con aviso” – Buenos Aires – 1997 – Libros de Tierra Firme. “Cartas para Beb” – Buenos Aires – 2007 – Edición del Autor. “Riachuelo” – Buenos Aires – 2008 – Ediciones de la Quintana. “Malena” – Buenos Aires – 2012 – Edición del Autor. “Estación de nosotros” – Buenos Aires- 2014 – Buenos Aires Poetry. “Visitas inoportunas” – Buenos Aires – 2014 – Editorial El jardín de las delicias. “Para un programa de disolución y otros textos” – Buenos Aires – 2016 – Ediciones En Danza. En 2024 la Editorial Pinap, de Buenos Aires, publicó su poemario Enígmática gracia de las cosas. Mantiene inéditos más de 10 volúmenes de poesía. Poemas suyos fueron publicados en revistas literarias de Argentina y el exterior, entre ellas Río Grande Review de la Universidad de Texas at El Paso, EE.UU.; Revista Nagari, Miami, EE.UU., y Littoral Magazine, Reino Unido. Poemas suyos han sido también publicados en revistas literarias en Colombia, Brasil y Rumania. Ha recibido diversas distinciones, entre ellas el Primer Premio en el Primer Concurso Nacional de Poesía “César Domingo Sioli”. de Argentina. Escribió varios artículos y reseñas en revistas literarias impresas y virtuales, de Argentina y del exterior.

ii Clara Beter Ediciones, ISBN 978-631-6513-60-1, 136 pp., Buenos Aires, 2025. WebPage: Tienda online de Clara Beter / Facebook: Clara Beter ediciones | Facebook / Instagram: htpps://www.instagram.com/clarabeterediciones/

E-mail: clarabeterweb@gmail.com / Tel.: 1150226977

iii Luis Benítez nació en Buenos Aires el 10 de noviembre de 1956. Sus 45 libros de poesía, ensayo y narrativa han sido publicados en Argenti­na, Chile, España, Estados Unidos, Francia, Inglaterra, Italia, México, Rumania, Suecia, Venezuela y Uruguay. Según la londinense Ars Notoria Magazine es considerado como una de las voces más destacadas de la poesía argentina contemporánea y referente del género a nivel latinoamericano. Ha recibido el título de Compagnon de la Poèsie de la Association La Porte des Poètes, con sede en la Université de La Sorbonne, París, Francia. Miembro directivo del Centro PEN Argentina, miembro activo de la Asociación de Poetas Argentinos (APOA) y de la Sociedad de Escritoras y Escritores de la República Argentina (SEA). Entre otros, su obra literaria ha recibido los siguientes reconocimientos nacionales e internacionales: -Premio Internacional de Poesía La Porte des Poètes. París, Francia, 1991. -Segundo Premio Bienal de la Poesía Argentina. Buenos Aires, Argen­tina, 1992. -Primer Premio Joven Literatura (Poesía) de la Fundación Amalia Lacroze de Fortabat. Buenos Aires, Argentina, 1996. -Primer Premio del Concurso Internacional de Ficción. Montevideo, Uruguay, 1996. -Primo Premio Tuscolorum di Poesia. Sicilia, Italia, 1996. -Primer Premio de Novela Letras de Oro. Buenos Aires, Argentina, 2003. -Accesit 10éme. Concours International de Poésie. París, Francia, 2003. -Primer Premio Internacional para Obra Publicada “Macedonio Palomino”. Aguascalientes, México, 2007. -Tercer Premio Municipal “Ricardo Rojas” de Novela. Buenos Aires, Argentina, 2022. -International Best Poets & Translators Prize, otorgado por The International Poetry Translation and Research Centre, The Journal of Rendition of International Poetry [Multilingual], y The Board of Directors of World Union of Poetry Magazines, Chongqing, República Popular China, 2024.-American Poet of the Year Award, otorgado por United Nations World Silk Road Forum y Silk Road International Federation. Dubai, Emiratos Árabes Unidos,2025.

iv La condition postmoderne: rapport sur le savoir, Les Éditions de Minuit, Londres, Reino Unido, 1979.

Compartir

Dejá un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio